sábado, 5 de diciembre de 2009

CUESTIONES BÁSICAS


Recientemente asistí a parte de una jornada sobre Técnicas de Facilitación en aprendizaje de Entornos que Cristina Koury D'Arce , Directora de la Consultoría Quartet Labe de Sao Paulo, tuvo a bien intentar condensar en una mañana.

En esta jornada, se habló de la importancia de realizar preguntas importantes, "cuestiones básicas estratégicas". Ya que esto es lo que puede preparar el terreno a la hora de abordar cualquier asunto, cualquier problema. Hay que hacerse preguntás básicas, preguntas claves, que surjan desde lo más hondo de nuestra inquietud o nuestra preocupación y que se dirigan a esclarecer aquello que nos preocupa.De otro modo, no podemos explorar la información de la que dispongamos, o podamos disponer de una forma dinámica, exploratoria ni tampoco podremos dar lo mejor de nosotros mismos, ni sumar nuestros conocimientos o los del entorno que nos rodee a la información disponible.

Independientemente del asunto que queramos tratar de abordar, podemos cuestionarnos lo siguiente:


  • Cual es el problema real que necesito abordar en este momento?
  • Cual es la pregunta esencial que me permitirá ver de otro modo el problema?
  • Es realmente clave la pregunta que acabo de plantear?
La calidad de la respuesta, por tanto, dependerá de la calidad de la pregunta. Otras preguntas claves serían también las siguientes:


  • Qué preguntas no me atrevo a realizar, a la hora de tratar este asunto, y por qué?
  • Qué impedimentos encuentro o me frenan a la hora de abordar este tema?
Según Cristina Koury D'Arce, una pregunta consciente, debe surgir de nuestro corazón. Nos tenemos que imaginar que es la pregunta que deberiamos hacer como si de ello dependiera nuestra vida. Una pregunta de este tipo, puede resultar inquietante, incómoda, comprometida, pero es clave, es esencial para poder partir de una información básica esencial y aprender.

Por norma, solemos frenarnos a la hora de realizar un planteamiento básico de cualquier asunto, pero no debe ser así. No tenemos que centrarnos en las respuestas, no tenermos que tener miedo a lo que pueda surgir. Debemos plantearnos preguntas vitales, claves, esenciales, esto es lo recomendable y saludable, no solo a nivel individual sino a nivel colectivo.Los individuos son los que forman parte de las organizaciones. Si ellos se permiten la osadía de cuestionarse en lo más básico, abrirse a nuevas informaciones y posicionarse en nuevas perspectivas, las organizaciones de las que forman parte también lo harán y se verán beneficiadas.

Mientras que en el caso contrario, cuando por distintos motivos, no nos atrevemos a plantearnos preguntas básicas, esenciales, que permitan ver distintos puntos de vista, nuevos enfoques a viejos o recientes problemas, por que nos autocensuremos o por miedo a la censura de otros, el aprendizaje colectivo se verá afectado negativamente, o simplemente no habrá aprendizaje.Lo que no salga a la luz , no podrá "iluminar" nuevas ideas o nuevos conceptos que, puestos sobre la mesa en un ejercicio reflexivo de grupo pueden llegar a aportar nuevas conclusiones, y ello repercutirá, logicamente en el conocimiento colectivo resultante.

Todo aprendizaje, abordado de tal modo, puede permitir el descubrir soluciones nuevas, sanas y sistémicas que no solo se pueden aplicar a nuestras vidas o nuestras organizaciones sino al conjunto de la sociedad.

Para más información, y como nos recomienda Cristina Koury D'Arce, puede resultar interesante echar un vistazo a las siguientes referencias.
  1. Bown,J.;Isaacs,D y Margulies,N. "Asking big questions:a catalyst for strategy evolution"

  2. Mintztberg,H."The Fall and Rise of strategic planning"

  3. Peavey,F. "Strategic questioning:An experiment in communication of the second kind".